¿Cuál ha sido tu experiencia de voluntariado en Covid-19? Cuéntanos tu historia
Mi experiencia personal como Presidente de la Asamblea ha sido ver el valor del voluntariado que tenemos en la Institución a los que he tenido que poner turnos para que no vengan todxs a la vez, ver esa gran corazón altruista del que hacemos gala, no preguntar para que se les envía a recoger, cargar, entregar, realizar llamadas y no escuchar nunca un no por respuesta.
¿Cómo ha cambiado el brote de coronavirus tu vida diaria?
Yo creo que como a todxs nos ha hecho cambiar nuestra forma diaria de comportarnos en materia de seguridad e higiene, valorar lo que tenemos alrededor, echar de menos los abrazos y tener aún más empatía.
¿Qué has aprendido del brote de coronavirus?
Lo fácil que es vencernos y la desorganización que tenemos a nuestro alrededor, con lo cual se aprende de los errores y a intentar “prepararnos para lo que venga”.
En el contexto de Coronavirus, ¿qué has hecho que te enorgullece?
Me enorgullece representar a la Institución con las personas que tengo a mí alrededor en el día a día.
Como persona voluntaria, ¿cuál es el principal desafío durante este brote de Covid-19?
El principal desafío que tenemos en nuestra provincia es llegar a las personas mayores, que además de ser los más vulnerables por sus edades, les sumamos la Pandemia y que la mayoría de ellos viven en pueblos alejados de grandes poblaciones.
¿Qué has visto por primera vez debido a Covid-19?
Miedo en las personas. Miedo a la pandemia, a perder los puestos de trabajo, a no tener que comer, a la falta de medicamentos, miedo en general a la vida normal y corriente que hasta ahora habíamos llevado.
¿Cómo crees que el ánimo y la esperanza pueden aumentar a través de nuestra respuesta al coronavirus?
Volviendo al espíritu y a los valores de la Cruz Roja y enfocar nuestros medios al necesitado.